Los vallecaucanos siempre hemos dicho “al bagazo poco caso”, pero ahora hasta el bagazo de la caña de azúcar sirve para producir energía y aglomerados para la producción de divisiones y muebles generando, de por sí, un aporte a la protección del medio ambiente evitando tala de árboles.

La industria de la caña ha sido un motor de desarrollo para el Valle del Cauca y Colombia; cualquier estrategia para desconocer esta realidad es solo uno de tantos caminos anárquicos que recorren quienes quieren sembrar inestabilidad en el país.

No se puede comparar desde ningún punto de vista la producción de azúcar, que genera miles de empleos, es un pilar importante en las exportaciones y la economía del país y es un cultivo legal, con la cocaína y la marihuana que son cultivos ilegales que ocasionan a las personas que las consumen traumatismos mentales, perdidas del sentido de pertenencia, conflictos familiares y laborales y proporciona a la sociedad colombiana grandes focos de delincuencia, extorsión y muerte.

 

ANDRES MEJIA CADAVID

PRESIDENTE SAG

CEL. 3163130144